Comparto el optimismo y la felicitación al gobierno nacional por la medida adoptada a través de la estrategia Ingreso Solidario, aunque resulta crucial que este beneficio llegue a las familias más vulnerables, 𝐒𝐈𝐍 𝐈𝐌𝐏𝐎𝐑𝐓𝐀𝐑 𝐒𝐔 𝐅𝐈𝐋𝐈𝐀𝐂𝐈𝐎́𝐍 𝐏𝐎𝐋𝐈́𝐓𝐈𝐂𝐀.
He venido pensando, 𝒂𝒖𝒏𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒎𝒆 𝒉𝒆 𝒔𝒆𝒏𝒕𝒂𝒅𝒐 𝒂 𝒉𝒂𝒄𝒆𝒓 𝒖𝒏 𝒆𝒔𝒕𝒖𝒅𝒊𝒐 𝒋𝒖𝒊𝒄𝒊𝒐𝒔𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒆 𝒑𝒆𝒓𝒎𝒊𝒕𝒂 𝒐𝒇𝒓𝒆𝒄𝒆𝒓 𝒖𝒏𝒂 𝒐𝒑𝒊𝒏𝒊𝒐́𝒏 𝒅𝒐𝒄𝒖𝒎𝒆𝒏𝒕𝒂𝒅𝒂, que las ayudas que se están ofreciendo en los diferentes departamentos y municipios con respecto a la alimentación estudiantil, no deberían brindarse a través de los paquetes de mercados, ya que los costos se elevan de manera escandalosa (𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐜𝐚𝐬𝐢 𝐞𝐥 𝟏𝟎𝟎% 𝐝𝐞𝐥 𝐯𝐚𝐥𝐨𝐫 𝐫𝐞𝐚𝐥), según defienden, por las implicaciones logística. Me pregunto si, para evitar esos sobrecostos sería más conveniente hacer los giros a los estudiantes y/o a sus familias, para que cada uno adquiera los productos, a los precios que más convenga a cada familia.
Me explico: según me compartieron lo que parece ser el contrato para los mercados estudiantiles en el municipio de Medellín, cada uno de los 220.578 paquetes entregado tendría un valor de $32.500, para un costo total de $ 7,168,785,000 𝐄𝐗𝐂𝐋𝐔𝐈𝐃𝐎 𝐄𝐋 𝐈𝐕𝐀, el cuál incrementaría el valor inicial del contrato en la no despreciable suma de $𝟏,𝟑𝟔𝟐,𝟎𝟔𝟗,𝟏𝟓𝟎.
Sin embargo, al revisar el contenido de cada paquete y compararlo con los precios de uno de los minimercados del pueblo en el que vivo (en el suroeste, a 3 horas de Medellín), 𝐞𝐥 𝐯𝐚𝐥𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐝𝐚 𝐦𝐞𝐫𝐜𝐚𝐝𝐨 𝐬𝐞𝐫𝐢́𝐚 𝐝𝐞 $𝟐𝟎.𝟎𝟎𝟎 𝐈𝐕𝐀 𝐈𝐍𝐂𝐋𝐔𝐈𝐃𝐎. Consideraría que en Medellín, si no es más barato, estaría por los mismo valores cada paquete.
Así las cosas, tomando ese valor ($20.000) como base, nos enfrentamos a la posible realidad de que el costo de los 220.578 paquetes sería tan solo de $𝟒,𝟒𝟏𝟏,𝟓𝟔𝟎,𝟎𝟎𝟎, dejando como sobrecosto por IVA y logística la suma de $ 𝟒,𝟏𝟏𝟗,𝟐𝟗𝟒,𝟏𝟓𝟎, es decir el 93% de lo que sería el valor real.
Si se consignara el monto establecido de $32.000 para cada paquete, los estudiantes podrían adquirir más productos, y se evitarían los sobrecostos. (Bueno, eso es lo que yo ignorantemente consideraría. Pues desconozco qué implicaciones tendría la consignación a cada estudiante y/o familia de esos recursos)
Un análisis similar sería interesante realizar, por ejemplo, con el Programa de Alimentación Escolar, para el cual, mediante el comunicado oficial de MANÁ, establece el valor de cada paquete en $38.680, y el cual al recalcularlo con los precios de uno de los minimercados del pueblo (sin tener en cuenta marcas), es de $25.500, para una diferencia de $13,210 por paquete, que al multiplicarlo por los 5,6 millones de niños que reciben este beneficio, representa un valor de 𝟕𝟒 𝐦𝐢𝐥 𝐦𝐢𝐥𝐥𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐩𝐞𝐬𝐨𝐬 ($73,976,000,000.00)
